Orientando las necesidades de la mujer musulmana

21/04/2009| IslamWeb

 

La vida está llena de muchas pruebas y tribulaciones. El mundo está lleno de dificultades ya que es parte del plan de Al-lah para probar a Sus siervos con varias tribulaciones y bendiciones. Al-lah ha decretado esto para que se diferencie el creyente del incrédulo, y los veraces y sinceros de los mentirosos e hipócritas. Dice Al-lah (lo que se interpreta en español): {¿Acaso piensan los hombres que se les dejará decir: ¡Creemos! sin ser puestos a prueba? Por cierto que probamos a quienes les precedieron, y Al-lah bien sabe quiénes son los sinceros y quiénes los mentirosos. } [Corán 29:2-3]
 
Existen muchas pruebas en esta vida, y una que parece ocurrir con gran frecuencia es la angustia psicológica, social y emocional. Estos es especialmente cierto para las mujeres, incluso las mujeres musulmanas. Informes y discusiones con profesionales de apoyo en varias partes de Occidente y en el mundo musulmán sugieren que existe una gran necesidad de servicios psicológicos y sociales para las mujeres musulmanas y las familias. Los problemas van de la depresión y la ansiedad al desmoronamiento de la familia y el divorcio, a la violencia doméstica y el abuso de los niños, y a formas severas de psicosis. La mala noticia es que existen muy poco profesionales entrenados capaces de comprender las necesidades religiosas y culturales de esta población y de tratarlos adecuadamente y orientarlos. Pero algo peor aún, es que son mucho menos los que están preparados para usar las verdaderas fuentes de sanidad: el Corán y la Sunnah, y así guiar a la persona a superar con éxito las pruebas dadas por Al-lah.
 
El dominio del secularismo
 
Hoy en día, el mundo está en completo caos y todo está virtualmente volcado al revés. Lo que es verdad se ha convertido en falsedad, y lo que es mentira se ha convertido en verdad. El mundo está en una fase de oscuridad como resultado de esto. Aquellos que intentan proclamar la verdad son considerados extraños, e incluso anormales. Esto también es un hecho en la profesión de la psicología y la orientación. Hace muchos años atrás, había un movimiento en Occidente para separar la religión de la ciencia en casi todas las disciplinas. Este movimiento es llamado secularismo y es el tema predominante en la ciencia actualmente, incluso se ha esparcido en varios países musulmanes, aunque aún vemos intentos de mantener el vínculo inherente entre la religión y la ciencia (basado en la tradición islámica).
 
Lo que esto significa para la profesión de la consejería es que muchos consejeros y orientadores (incluso los musulmanes) continúan confiando en las concepciones occidentales de la psique humana y los métodos de curación. Los puntos principales de estas aproximaciones son los pensamientos, sentimientos y conducta. El alma es dejada fuera de la ecuación, debido antigua separación entre ciencia y religión. El resultado lamentable es que obtienen un éxito limitado en la consejería y un tratamiento superficial del tema. La preocupación de las mujeres musulmanas es que a menudo no pueden encontrar una consejera musulmana que verdaderamente las comprenda; y si la encuentran, la consejera sólo les puede ofrecer lo que cualquier otro consejero no musulmán les habría ofrecido. El resultado es con frecuencia frustración, desesperación y prolongación de la tribulación.
 
Necesidades especiales de orientación de las mujeres musulmanas
 
Las mujeres musulmanas necesitan ayuda para comprender el plan y la guía de Al-lah. Esta ayuda debe venir a través de otras hermanas musulmanas de la Ummah. A menudo los hombres pueden acudir a un Sheij u otros líderes religiosos en la comunidad, pero ¿a dónde va una mujer? Puede que un Sheij no sea capaz de comprender las necesidades especiales de las mujeres, puede tener prejuicios negativos o puede no ser accesible. También, la mujer puede sentirse avergonzada o reacia a pedir ayuda de un Sheij u otro hombre en la comunidad. La Ummah necesita hermanas que estén entrenadas en temas islámicos para aconsejar, que tengan un sólido y completo conocimiento de la religión, y una Aquidah y un Tawhid fuertes. El conocimiento de la religión es tal vez más importante que el conocimiento de la consejería, ya que la cura vendrá de esta fuente.
 
Como una Ummah, tenemos una obligación para con nuestras hermanas que están experimentando dificultades y angustias. Al-lah nos prueba a todos tanto con calamidades como con bendiciones, para que se evidencie quién será agradecido y paciente y quién será ingrato e impaciente. Él también quiere mostrar quiénes serán Sus siervos obedientes y quiénes serán desobedientes y desafiantes. Aquellos que han recibido bendiciones deben usarlas en el servicio de Al-lah para beneficiar a otros en la comunidad. Ellos deben trabajar para aliviar el sufrimiento y las luchas de sus hermanas en el Islam. Esto en realidad es un Fard Kifaiah u obligación comunal, y continuará siendo hasta que los miembros de la comunidad cumplan su responsabilidad.
 
Ya sea en las tribulaciones o en las bendiciones, aquellos que se esfuerzan por complacer a Al-lah y acercarse más a Él, tendrán las mejores recompensas. Ellos obtendrán la protección, la guía y el amor de Al-lah. El Profeta, sallallahu ‘alayhi wa sallam, resumió esto en pocas palabras cuando le dijo a Ibn ‘Abbas, que Al-lah Esté complacido con él: “Oh, joven, te enseñaré algunas palabras (de consejo): sé consciente de Al-lah y Al-lah te Protegerá; sé consciente de Al-lah y lo encontrarás en frente de ti; si pides, pide de Al-lah; si buscas ayuda, busca ayuda en Al-lah. Ten por seguro que si la nación entera se reuniera para beneficiarte con algo, no te beneficiarían con nada excepto con lo que Al-lah ya ha registrado para ti. Si ellos se reúnen para dañarte con algo, no podrán dañarte con nada excepto con lo que Al-lah ya ha registrado en contra de ti. Se han levantado las plumas (que registran) y las páginas se han secado”. [At-Tirmidhi]
 
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